LOCAL / Acudir al Hospital General de Misantla es en muchos casos ariegar la vida a causa de la serie de deficiencias que presenta la inst...
LOCAL / Acudir al Hospital General de Misantla es en muchos casos ariegar la vida a causa de la serie de deficiencias que presenta la institución, tales como la falta de personal, equipo médico y la apatía de los que ahí laboran.
Crónica de Misantla.- Negligencias, carencias y maltratos, son algunas de las deficiencias del Hospital General de Misantla que no han podido resolver las administraciones a su cargo, por lo que en muchas ocasiones los usuarios exponen aún más su salud y arriesgan hasta la vida.
El “trato inhumano” que reciben muchas personas es una de las mayores quejas de quienes acuden al nosocomio y, que va desde la tardanza en su atención en casos de urgencia, hasta la apatía en la atención de los enfermos, según expresan algunas fuentes anónimas.La falta de personal especializado de planta y equipo médico, aunado a la desidia del equipo de trabajo actual colocan al Hospital General de Misantla dentro de las estadísticas que premian a México como una de las naciones con mayor grado de deficiencias en el tema de atención a la salud, según datos de la OMS en 2010.
Aunque México posee 58 facultades de medicina, las cuales gradúan alrededor de 7 mil 800 nuevos médicos anualmente, a quienes se les expide el título de médico cirujano, a misantla solo llegan 2 cirujanos para atender la demanda existente en la región (Misantla, Colipa, Yecuatla, Vega de Alatorre, Juchique, Alto Lucero y Tenochtitlán).
Uno labora solo algunos días a la semana y lo hace a partir de las 6 de la tarde y unas cuantas horas por la mañana. Es pasante de Cirujano.
Otro labora los fines de semana y tampoco solventa la demanda que hay en cirugías generales. En ambos casos los pacientes deben esperar varios días antes de ser operados gracias a la falta de especialistas, quedando en riesgo por falta de atención oportuna.
La atención de la salud en México está dividida entre grupos: el Sector Social que cubre aproximadamente el 53% de la población y que está financiado por la fuerza laboral, el Estado y el empleador; un Sector Público o Abierto que cubre el 33% de la población y que es financiado con fondos federales y estatales; y un Sector Privado que cubre el 5% de la población y que pose dos categorías: la de los hospitales sin ánimo de lucro y la de las instituciones con ánimo de lucro. La mayoría de los médicos pueden trabajar en cualquiera de los 3 grupos, o en combinación. El 9% de la población mexicana, por extrema ignorancia, pobreza y aislamiento no posee acceso alguno, o sólo lo tiene mínimo, a la atención médica.
La falta de equipo médico ha generado que muchos necesitados de atención sean trasladados a otras ciudades del estado; lo peor viene cuando requieren de atención urgente. Muchos han perecido en el traslado, mientras que otros, de escasos recursos se ven en serios aprietos para cubrir gastos en otras ciudades.
En cuanto al trato y servicios del hospital, “depende en gran parte de cómo te veas, si te vez bien, de dinero, te atienden muy bien, pero si te vez mal te tratan como perro casi”, destacan.
Algunos manifiestan que en algunos casos la química que se genere entre el paciente y el médico o los enfermeros es de gran valor, pues “si les caes bien te tratan bien, pero hay mucha gente a la que tratan mal o no le ponen atención porque se ven muy humildes y eso es desde que entras y te topas con algunos policías prepotentes”.
Pero no todo es negro, como todo, hay médicos y enfermeros que realizan su trabajo con gusto o al menos lo hacen de manera muy profesional y son a los que “se les agradece el cuidado del paciente”.
Cortado de un dedo pero fuera de peligro, no recibió la atención adecuada. Lo programaron para oporarlo hasta 10 dias después de su ingreso a causa de una infección no controlada a tiempo.