Crónica de Misantla.- En deplorables condiciones viven por lo menos 100 familias de las que resultaron afectadas por el huracán Karl el año...
Habitantes de la localidad el Cascajal de la colonia Vicente López, denuncian, se quedaron en promesas los espectaculares apoyos, realizados por la administración Duartista y de Desarrollo Social, la mayoría duerme en el suelo, en casas de campaña que el Club Rotario Internacional les regaló, y otros, han rehabilitado sus viviendas con madera o láminas de desperdicio.
En entrevista para Plumas Libres, Genaro Ambrosio Lucio, padre de una família de cinco integrantes, lamentó, pese a la desgracia que sufrieron por el desborde del rio la Antigüa, por el golpe de agua del huracan Karl, han sido olvidados por las autoridades de todos los niveles, municipal, estatal y federal.
Relató, el primero en lucrar con la desgracia y adjudicarse la mayoría de las láminas, despensas y ropa que llegaron para los afectados, fue el ex alcalde priista Aureliano Domínguez, junto con los integrantes de su comuna, abordaban los trailers y seleccionaban la ropa, las láminas, despensas, para despues venderlas hasta en 100 pesos a cada afectado.
A un mes, de que el alcalde de extracción panista Arturo Navarrete, asumió la administración del municipio de la Antigua, continúa sin visitar la zona de los afectados, y quienes le han solicitado apoyo en sus oficinas, no han sido atendidos, "nos mandó a decir que él, realizará un recorrido por el Cascajal, para ver en qué apoya, pero no nos dio la fecha ni la hora".
La diputada local por el distrito de la Antigua, Karime Aguilera, presidenta de la comisión de Hacienda de la legislatua local, solo recorrió la zona de la tragedia una sola vez, desde el mes de Septiembre, dijo, les enviará apoyos en despensas, ropa, zapatos o útiles escolares para los menores, se ha desentendido.
La administración de Javier Duarte de Ochoa, a través del secretario de Desarrollo Social y Medio Ambiente, Marcelo Montiel Montiel, tampoco ha canalizado los apoyos a los que se comprometió la administración.
La Secretaria de Protección Civil con su titular, Nohemi Guzmán Lagunes, suspendió las reuniones a las que habian sido invitados hasta el mes de noviembre, en las que la ex titular del área Silvia Dominguez, les anunció sobre reubicación de todos los habitantes de la rivera del rio, con el propósito de evitar otras desgracias en el futuro.
En la localidad del Aserradero, mas próxima a la Antigûa, la administración de Fidel Herrrera, construyó 30 pies de casa, fueron invitadas el mismo número de famílias. Se anunció el evento, con "bombo y platillo", el ex gobernador entregó las llaves de las casitas, que según el entrevistado, resultaron inhabitables por el exceso de calor, y la mala calidad en la construcción.
Armanda Méndez Ortiz, madre soltera, relató, "yo acepté irme, pero vimos que en el Aserradero, donde el gobierno del estado, pretendió reubicarnos, pasan ductos de Petroleos Mexicanos, que transportan combustible. A todos nos dio miedo y decidimos abandonar las casitas".
Lamentó la insencibilidad con la que el gobierno federal, a través del secretario de Desarrollo Social, Heriberto Félex Guerra, tomó la desgracia de los habitantes del Cascajal, "vino al otro dia de la inundación, muy apapachador y asustado, nos prometió que nos mandaría apoyos a través de los programas federales como 70 y mas, Oportunidades o Jornaleros, pero solo nos mintió. Continuamos esperándolo".
Dijo, la mayoria de las mujeres madres solteras, se han visto en la necesidad de salir a trabajar en labores domésticas, porque el gobiernpo de Felipe Calderón Hinojosa, a través de la SEDESOL, los abandonó a su suerte, "si el secretario dio la orden, nadie le hizo caso, la gente de la delegación del estado, tampoco nos ha visitado, a los medios les dicen una cosa, pero esta es nuestra realidad".
Méndez Ortiz muestra su humilde vivienda, rehabilitada con la madera que arrastró el rio, pedazos de lámina de cartón. En colchones que trajo la corriente, ya lavados, duermen ella y sus hijos Luis, Angel y Mónica. Todos menores de edad, dos de los cuales, no van a la escuela primaria porque no le alcanza para poder pagar sus estudios.
La vida en la colonia el Cascajal, desaparecida por el golpe de agua del huracán Karl, parece transcurrir con normalidad. Los hombres salen temprano, a labores del campo en su mayoría. Otros, los adultos mayores, pasan gran parte del día, al frente de sus casas de campaña, a la espera de la caridad de algún vecino, que les lleve alimento.
El panteón de Cardel, ubicado al frente de la colonia el Cascajal, mantiene aún la barda principal destruida. Las autoridades municipales, no se han preocupado aún por reparar los efectos del huracán.
Los restos de mas de 15 muertos que el agua sacó de sus tumbas, fueron por fin regresados a sus lugares por trámites de sus familiares, mientras que otros cinco, se fueron a la fosa común, olvidados por siempre por sus seres queridos.